Monterrey, NL. El presidente Enrique Peña Nieto visitó la noche de este jueves el Hospital Universitario en Monterrey, donde se encuentran internados la maestra y uno de los alumnos que resultaron heridos en el colegio Americano del Noreste el miércoles.

Cerca de las 19:20 horas el convoy de vehículos ingresó al hospital y fue media hora más tarde cuando Peña Nieto salió y atendió por breves minutos a la prensa al pie de si camioneta. Antes de retirarse del nosocomio, el mandatario explicó el motivo de la visita:
“Estamos acá por un solo motivo y no era el propósito mas que para hacer patente nuestra solidaridad con las familias de los jóvenes, de la maestra Cecilia y los alumnos que resultaron afectados en este hecho que sin duda ha consternado a toda la sociedad mexicana”.

“Como Presidente me hago aquí presente para expresar la mayor solidaridad con los familiares y conocer el estado de salud que guardan tanto la maestra como los jóvenes y yo espero que tengan una pronta recuperación”.

“Hoy los médicos me comparten que hay una evolución satisfactoria, he ofrecido toda la disposición de los institutos de salud del gobierno federal para que a partir de la evolución que tengan los pacientes y de requerirse estaremos mas que atentos para poder apoyarlos. Y reitero no es mas que tener esta presencia de solidaridad y expresarla en nombre de la sociedad mexicana de un hecho tan trágico que ha consternado y conmovido a toda la sociedad mexicana”, señaló Peña Nieto, quien no dio oportunidad a más preguntas y se retiró con un “buenas noches, muchas gracias”.

Un grupo de tres mujeres se manifestó de forma pacífica y aunque trataron de desplegar una manta no se los permitió el Estado Mayor Presidencial.

“Venimos en pie de lucha, no al gasolinazo, no a la reforma estructural, fuera Peña Nieto”, dijo Erika Galván del Colectivo Maestros de Nuevo León mientras sostenía una manta con la leyenda “Fuera Peña Nieto”.

Cuando el mandatario se marchó, las inconformes se quejaron con los medios por no haber podido hablar con Peña Nieto.

Peña se trasladó sólo con colaboradores cercanos y sin equipo de comunicación, incluso de la Presidencia.