*Patrones laborales, urbanos y de movilidad sufrieron una serie de transformaciones
Cecilia Perezgasga Ciscomani
Los patrones laborales, urbanos y de movilidad en la zona de Santa Fe en la Ciudad de México sufrieron una serie de transformaciones durante y después del COVID-19, cuyos impactos han sido analizados por investigadoras del Departamento de Ciencias Sociales en la Unidad Cuajimalpa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
Como parte de este proyecto, coordinado por Ximena Manríquez García y María Moreno Carranco, se registraron datos cuantitativos y cualitativos a partir de los testimonios de experiencias sobre cómo se vivía la crisis sanitaria en los diversos actores que participaron en el trabajo de campo.
La doctora Rocío Guadarrama Olivera señaló que en noviembre de 2020 se comenzó el análisis de comportamiento de los mercados de trabajo y del inmobiliario, tomando en cuenta que Santa Fe es una mancha muy heterogénea, donde prevalece el turismo de negocio. Entre 2020 y 2021 hubo una reconfiguración y sobrevino una demanda sobre todo en servicios de administración, marketing, ingenierías y ventas en línea.
En algunos rubros como la hotelería, restaurantes y cafeterías hubo cambios profundos, así como en los trabajos administrativos en los corporativos. Los datos cuantitativos y cualitativos demostraron que hubo pérdida de empleos, sobre todo en los poco calificados; muchos de los asalariados de esta categoría abandonaban sus cargos por cuestiones de movilidad.
De acuerdo con Manríquez García, hicieron una revisión estadística para dar cuenta de los establecimientos económicos y los giros que se modificaban como consecuencia de la pandemia, pero la sustancia primaria se basó en las declaraciones obtenidas a través de las entrevistas a las personas que viven el día a día en Santa Fe y zonas aledañas.
Las 33 entrevistas conseguidas se realizaron entre el 2020 y 2023, sobre todo de manera remota, con una duración aproximada de una hora cada una. Aparecieron tres perfiles de entrevistados con base en su ocupación: los que trabajan en entidades privadas, entre ellos propietarios, directores generales o administrativos; los servidores públicos que se desempeñaban en la Alcaldía de Cuajimalpa, y los residentes de Santa Fe y alrededores.
Las preguntas se basaron en tres grandes aspectos: las afectaciones que dejó la pandemia en el ámbito laboral, las modificaciones que hubo en el modelo de trabajo de lo presencial a lo remoto o a lo híbrido, cambios en los espacios y jornadas laborales, entre otras. Otro aspecto se concentró en el mercado inmobiliario y la transformación de la demanda de oficinas y casas habitacionales.
Un tercer punto abordaba el sentir de los habitantes objeto de estudio en torno a las transformaciones que provocó la pandemia, cambios en sus rutinas cotidianas, cómo contemplan el futuro a mediano y largo plazos en términos de la reactivación económica, de la movilidad, de las plazas al aire libre, entre otros aspectos.
A partir de su análisis, pudieron determinar nueve sectores económicos establecidos en la zona: alimentos, hotelería, banca, comunicación, educación, inmobiliario, movilidad y actividades diversas de servicios y comercio. El sector de alimentos se refiere sobre todo a la industria de los restaurantes, que fue visiblemente afectada por la emergencia sanitaria en la organización del trabajo, pues hubo reducción de personal y cambios en las jornadas.
La esfera hotelera fue una de las más golpeadas durante la pandemia y de las que más tardó en recuperarse, indicó la doctora Moreno Carranco, quien advirtió que en Santa Fe cada edificio de oficinas tiene una gran cantidad de espacios vacíos y es un problema que tiene muchos años en la circunscripción, aunque a partir de la crisis sanitaria se agudizó; lo mismo sucede con algunas unidades habitacionales.
En definitiva, lo que sí se vio alterado en términos inmobiliarios fueron las oficinas, que en Santa Fe es el mercado inmobiliario más grande de la Ciudad de México; actualmente, ya se ven signos de recuperación. Al observar otros sitios de la Ciudad de México, como las colonias Roma o Condesa, ofrece una perspectiva de cómo los fenómenos estudiados resultan distintos en cada lugar.
Esta investigación impulsó un programa de servicio social para estudiantes con el objetivo de consolidar sus conocimientos y saberes prácticos en metodologías mixtas aplicadas. Participaron nueve estudiantes de la Licenciatura en Estudios Territoriales, de los cuales dos hicieron su tesina con base en este proyecto.
Durante la presentación, el maestro Octavio Mercado González, rector de la Unidad Cuajimalpa, destacó que este trabajo es un ejemplo virtuoso de la manera en que el trabajo de los investigadores en la UAM Cuajimalpa se involucra con temas del entorno, logrando indagar con profundidad sobre las coyunturas y los cambios relevantes.
“Este es uno de los proyectos más representativos del Departamento de Ciencias Sociales que contó con un importante apoyo por parte de la Rectoría General y de una gran cantidad de académicos de las otras dos divisiones de la Unidad. Es un esfuerzo por aproximarse a la zona de influencia de esta casa de estudios para atender a sus necesidades”, subrayó el jefe del Departamento de Ciencias Sociales en la UAM Cuajimalpa, doctor Rafael Calderón Contreras.