*La obra de José Revueltas comprendió novela, cuento, dramaturgía, guion y ensayo  

• Se cumplen 108 años del nacimiento de uno de los escritores más reconocidos en el panorama literario; en 1967 recibió el Premio Xavier Villaurrutia por su trayectoria  
• Fue encarcelado en cuatro ocasiones, en el Palacio Negro de Lecumberri y las Islas Marías

Novelista, cuentista, dramaturgo, guionista, ensayista, teórico y filósofo autodidacta, José Revueltas, perteneciente a una familia de artistas e intelectuales, se distinguió por su vasta obra literaria y su activismo político.  

Nació el 20 de noviembre de 1914, en Santiago Papasquiaro, Durango. Fue hermano del compositor Silvestre, del pintor Fermín y de la actriz Rosaura Revueltas, todos reconocidos en el campo cultural mexicano.  

Asimismo, escribió cuento, novela y ensayo, cuyos temas iban de la lucha de clases a aspectos poco conocidos sobre la psicología humana, de ahí que muchas veces se le haya comparado con Fiódor Dostoievski, por quien sentía una gran admiración.  

Atraído por la ideología marxista, fue miembro del Partido Comunista Mexicano, cuyo dogmatismo fue analizado y cuestionado en su célebre novela Los días terrenales (1949).  

En obras como El luto humano (1943) y Dios en la tierra (1944) se ocupa de la idiosincrasia de su país; en Los errores (1964) plasma sus cuestionamientos políticos; México: una democracia bárbara (1958) y Ensayo sobre un proletariado sin cabeza (1962), son textos teóricos en los que manifiesta su pensamiento crítico.  

En 1967 recibió el Premio Xavier Villaurrutia por su trayectoria literaria. Sus obras han sido traducidas al inglés, italiano, húngaro, francés, polaco y alemán. Según el crítico literario, Evodio Escalante, José Revueltas “representa en América Latina acaso el ejemplo mejor logrado de que los caminos de la disidencia política y de la literatura no necesariamente se contraponen”.  

En su opinión, Revueltas fue un “marxista comprometido”, pero también fue lo contrario al escritor conformista al que bastaba saber que la literatura ha de subordinarse ante las tareas que le impone la gran política. “Autor de una escritura lúcida e implacable, erigió un testimonio de un profundo valor autocrítico”.  

En homenaje a su legado literario, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) instituyó en 1976 el Premio Bellas Artes de Ensayo Literario José Revueltas, que han recibido autores como Eduardo Casar, Patricia Rosas Lopátegui, Edith Negrín, Fernando Curiel, Vicente Quirarte, Daniel González Dueñas y Verónica Volkow, entre otros.  

Debido a su militancia, fue apresado en varias ocasiones y conducido a la cárcel de Lecumberri y a las Islas Marías. Producto de esas experiencias surgieron algunas de sus novelas más emblemáticas: Los muros de agua (1941) y El apando (1969).  

Su solidaridad con diversos movimientos políticos y sociales, como la huelga de trabajadores de Nuevo León en los años treinta, el movimiento ferrocarrilero a fines de los cincuenta, y las protestas estudiantiles del 68, generaron acciones represivas en su contra.